Cirrosis significa marrón. La cirrosis hepática es una condición en la que el hígado se vuelve duro y más pequeño. Debido a la función hepática deteriorada, los pacientes desarrollan síntomas como fiebre, dolor en el área del hígado, aversión a la comida, náuseas, debilidad, etc. El paciente se vuelve pálido con venas azules prominentes en el rostro. Las proteínas del intestino se mezclan con la sangre envenenada debido a las toxinas y llevan a la muerte del paciente. Por lo tanto, la cirrosis hepática es una enfermedad mortal.
Sin embargo, cuando alguna toxina externa o interna continúa introduciéndose en el hígado en pequeñas cantidades constantemente, ocurre el crecimiento de células en el sitio de las células muertas o en presencia de infiltración de tejido fibroso, lo que lleva a un aumento de tamaño y endurecimiento del hígado. Esto se llama agrandamiento hepático agudo. Su incidencia es mayor entre los hombres de entre 40 y 50 años.
Remedios caseros naturales para tratar la cirrosis hepática
Remedios caseros simples para tratar la cirrosis hepática con limón: Corta un limón en cuatro partes sin separarlas. Llena una parte con sal, otra con pimienta negra molida, la tercera con polvo de jengibre liofilizado y la cuarta con azúcar. Déjalo reposar durante la noche en un plato cerrado. A la mañana siguiente, colócalo en una estufa caliente y chúpalo. Esto curará los problemas hepáticos y estimulará el apetito. No puede haber un remedio más efectivo para tal paciente.
Cómo deshacerse de la cirrosis hepática Remedios herbales para tratar la cirrosis hepática con cilantro: Prepara un polvo (churan) de semillas de cilantro y jengibre seco, agrega sal y toma todo esto tres veces al día. Esto proporciona alivio de los problemas hepáticos, pérdida de apetito y fortalece significativamente el hígado. También mejora mucho el apetito.
Recetas caseras para tratar la cirrosis hepática Remedios naturales para tratar la cirrosis hepática con sal: Toma 1/2 cucharadita de sal y 4 cucharaditas de semillas de mostaza, mézclalos bien y aplícalo en el área del hígado durante cinco minutos, enjuágalo y luego aplica ghee. Esta receta es beneficiosa para aliviar el dolor hepático.
Remedio casero efectivo para la cirrosis hepática con hojas de betel: Aplica aceite en el lado liso de la hoja de betel, colócala en el área del hígado y envuélvela en un trozo de tela. Esto aliviará el dolor hepático.
Buen remedio casero para la cirrosis hepática con calabaza de botella: Coloca la calabaza de botella al fuego, tritúrala, exprime el jugo, mézclalo con azúcar y bébelo. Esto es importante para los pacientes que padecen enfermedades hepáticas.
Consejos dietéticos para la cirrosis hepática Remedios naturales tradicionales para tratar la cirrosis hepática con arroz: Levántate antes del amanecer, enjuaga tu boca y mastica algunos granos de arroz. Esta receta es muy beneficiosa para fortalecer el hígado.
Manzanas: Beneficiosas para las dolencias hepáticas. Proporcionan fuerza al hígado.
Otras sustancias que fortalecen el hígado incluyen mantequilla y leche, bathua, granada, manzana rosa, remolacha y ciruelas. Proporcionan alivio de la flatulencia y el estreñimiento. Su uso regular es recomendable en el tratamiento de la cirrosis hepática.
