La epididimitis es una de las afecciones más comunes que afectan al escroto en los hombres. La epididimitis implica la inflamación del epidídimo, que es causada en la gran mayoría de los casos por una infección bacteriana. Además, la condición puede desarrollarse como resultado de una lesión.
La epididimitis se clasifica como una de las enfermedades «expresadas», acompañada de dolor y malestar que empeoran la calidad de vida del paciente. Dependiendo de la forma y etapa del desarrollo de la epididimitis, un hombre puede experimentar no solo molestias al caminar, sino también pérdida temporal de movilidad.
Síntomas
La epididimitis se puede reconocer por los siguientes síntomas. En primer lugar, hay sensaciones dolorosas y hinchazón en el área del escroto, y en etapas avanzadas de la enfermedad, el apéndice testicular a menudo se agranda tres o cuatro veces su tamaño normal. Otro síntoma evidente de la epididimitis es sangre en la orina y dolor al orinar.
La epididimitis también se acompaña de dolor abdominal, secreción purulenta de la uretra, fiebre y escalofríos.
Clasificación
La epididimitis se clasifica en formas agudas y crónicas. La epididimitis aguda es una condición que dura no más de un mes y medio. Con mayor frecuencia, la epididimitis aguda ocurre en hombres de veinte a cuarenta años. Los casos de la enfermedad en niños y adolescentes son extremadamente raros. En ausencia de tratamiento (o con tratamiento inadecuado), la epididimitis aguda puede progresar a la forma crónica. La epididimitis crónica se caracteriza por dolor escrotal, pero típicamente sin un agrandamiento significativo del escroto.
A pesar de la aparente mejoría en la condición de salud del paciente, la epididimitis crónica tiene consecuencias más graves que la epididimitis aguda (incluido el desarrollo de infertilidad), y por lo tanto requiere intervención quirúrgica por parte de los médicos.
El tratamiento de la epididimitis se lleva a cabo en dos direcciones:
1 – combatiendo la fuente de la enfermedad, 2 – reduciendo las sensaciones de dolor. En el primer caso, se utiliza terapia antibiótica (antibióticos), y en el segundo caso, se aplican supositorios rectales, compresas y una serie de medidas preventivas. ¿Es posible tratar la epididimitis en casa, de forma independiente? No es recomendable hacerlo, sin embargo, existen varios remedios caseros para tratar la epididimitis que pueden ayudar a aliviar el dolor y la hinchazón si no eliminar la enfermedad por completo.
Tratamiento con Remedios Caseros:
Mezcla de hierbas para tratar la epididimitis aguda. Combine cuatro cucharadas de una mezcla preparada con hojas de abedul picadas, raíz de lycopus, tanaceto, zumaque y bayas de enebro en proporciones iguales. Vierta un litro de agua hirviendo sobre la mezcla e infusiónela durante 20-30 minutos. Tome un vaso del líquido filtrado y enfriado tres veces al día independientemente de las comidas.
Mezcla de hierbas para tratar la epididimitis crónica. Prepare tres cucharadas de una mezcla de bayas de enebro y anís triturados, raíces de diente de león y lycopus, hojas de bolsa de pastor y tallos de perejil en proporciones iguales. Luego vierta 500 ml de agua hirviendo sobre la mezcla, infusione durante 20-30 minutos y cuele. Tome un vaso de la infusión tres veces al día.
Mezcla de hierbas para tratar la epididimitis crónica #2. Prepare dos cucharadas de una mezcla de violeta perfumada, cola de caballo, hojas de arándano y maíz. Luego vierta un litro de agua sobre la mezcla, infusione y tome tres veces al día, dos o tres cucharadas cada vez.
Mezcla de hierbas para tratar la epididimitis. Prepare dos cucharadas de una mezcla de flores de artemisa común, cola de caballo y hojas de arándano. Vierta 300 ml de agua hirviendo sobre la mezcla, infusione durante media hora y cuele. Beba la mezcla por la mañana y por la noche, un vaso cada vez con las comidas.
Tintura para tratar la epididimitis. Agregue 50 gramos de tallos y hojas de peral a 500 ml de vodka y déjelo reposar en un lugar oscuro durante dos semanas. Tome la tintura de 30 a 40 gotas tres veces al día antes de las comidas.
Infusión de hojas de peral. Vierta dos cucharaditas de hojas de peral con un vaso de agua hirviendo y déjelas infusionar durante dos horas en un termo. Beba la infusión colada y tibia 50-70 ml tres veces al día.