El hígado es el principal filtro de todo lo que bebemos y comemos. Es aquí donde se decide el destino de cada producto que ingresa al cuerpo a través de la boca y luego los intestinos. Nuestro pobre hígado pasa toda su vida decidiendo qué es beneficioso para nosotros y qué es veneno, que debe neutralizarse con bilis y devolverse a la naturaleza.
Ahora, piensa en cuántas cosas dañinas consumiste ayer y hoy. Alcohol, comidas grasas, ahumadas y fritas… ¡Incluso una sierra se embotará si la usas para cortar hierro! Si sientes dolor en el lado derecho bajo las costillas, significa que necesitas tratamiento para tu hígado, lo que significa que debes ver urgentemente a un médico. Tu propio salvador interno está pidiendo tu ayuda.
El tratamiento del hígado es una actividad agradecida. Puede regenerarse incluso a partir del pedazo más pequeño que quedó cuando lo recordaste. Trátalo de manera integral, sin olvidar la medicina popular.
Recetas populares para el tratamiento del hígado
Maíz.
Corta una mazorca madura, retira las hojas y recoge cuidadosamente las fibras blancas de la superficie de los granos. Estas fibras delicadas son el remedio para el tratamiento del hígado. Prepáralo en lugar de té y bébelo durante seis meses.
«Bazikalo» (remedio tradicional ucraniano).
Toma seis huevos crudos blancos, 300g de miel y un litro y medio de leche. Vierte la miel en un frasco de tres litros, coloca los huevos bien lavados encima y vierte la leche sobre ellos. Ata el cuello con gasa o tela y colócalo en un lugar oscuro durante dos semanas. Para este momento, los huevos flotarán. Recolecta el moho blanco de la parte superior, retira los huevos y cuela el líquido restante a través de un colador. Pincha cuidadosamente los huevos con una aguja y suelta la clara, desecha las yemas en la cáscara. Cuela el líquido drenado del frasco seis veces, combínalo con la clara de huevo y toma 20g en ayunas.
Jugo de limón.
Mezcla jugo de limón, un vaso de aceite de oliva y 250g de miel y toma una cucharada media hora antes de las comidas, acompañado de nueces.
Jugo de bardana.
Se consume solo en mayo. Recoge las hojas, enjuágalas, eliminando los tallos. Tritura a través de una picadora de carne o licuadora, exprime y toma una cucharada antes de las comidas.
Hoja de laurel y avena.
Hierve hojas de laurel picadas (30g) y medio vaso de granos de avena, vierte agua hirviendo (0,5 litros), deja reposar durante 6 horas en un lugar oscuro, cuela, endulza el líquido con una cucharada de miel y toma 20g en ayunas.
El cáñamo ayudará con los cálculos biliares.
Pasa un vaso de semillas de cáñamo por una picadora de carne, vierte tres vasos de leche, cocina a fuego lento hasta que se reduzca a un vaso, y bebe caliente en ayunas. Repite durante cinco días.
El tratamiento del hígado debe ser integral y antes de tomar decocciones o infusiones, consulta con un médico. Tu recuperación será el doble de rápida si ayudas a tu cuerpo a lidiar con el problema con remedios populares. ¡Mantente saludable!